La cebolla peruana es reconocida por su calidad excepcional, especialmente las que provienen de la campiña arequipeña, consideradas por muchos como las mejores del país. Estas cebollas se destacan no solo por su sabor sino también por su tamaño y textura, siendo un ingrediente fundamental en la gastronomía peruana. La producción de cebolla en Perú es estable durante todo el año, principalmente en la costa, y aunque el calibre de las cebollas varía, esto no ha impedido que Perú se posicione como un importante proveedor mundial. En 2022, Perú exportó cebollas por un valor de 109 millones de dólares, manteniendo el volumen de exportación y aumentando su valor en un 5% respecto al año anterior. Los principales destinos de exportación son Estados Unidos, Colombia y España, lo que refleja la demanda internacional por la cebolla peruana.