Perú es reconocido por su diversidad de frutas exquisitas, y las naranjas no son la excepción. Con variedades como las Navel, Valencia Late y las únicas naranjas sanguinas, los cítricos peruanos ofrecen una rica paleta de sabores que enriquecen la gastronomía local y mundial. La naranja Lanelate, por ejemplo, es apreciada por su alta calidad organoléptica y su capacidad de conservación, lo que la hace ideal para la exportación. Además, el cultivo de naranjas en Perú se beneficia de un clima favorable, lo que permite a los agricultores producir frutas de excelente calidad que son beneficiosas para la salud, especialmente para la salud ocular. La Asociación de Productores de Cítricos del Perú trabaja para representar y apoyar a los agricultores de estas frutas vitales, asegurando que las naranjas peruanas mantengan su reputación de calidad superior.